Estos espacios son susceptibles de ocuparse con contenidos de interés educativo (información administrativa, oferta cultural, eventos del centro) e incluso curricular (información de campañas, exposiciones monográficas, exposiciones de trabajos desarrollados por alumnos del centro, ....)
Esa OKUPAción de los rincones del centro promueve y potencia (al menos puntualmente) la interdisciplinaridad en un centro educativo, algo que parece que es deseable. O por lo menos,
saca de las aulas al alumno y su trabajo, ventila recursos, metodologías y actividades, permite compartir experiencias y facilita el trabajo colaborativo.
Sin embargo, tan importante como la OKUPAción de los espacios comunes es la organización y la gestión de los mismos.
¿Ocupamos y gestionamos adecuadamente la información disponible en los espacios comunes de nuestro centro?
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